Dicen que el equipo de fútbol más regular en el campeonato argentino, es generalmente el que sale campeón.
Sin embargo, el Club Atlético Boca Juniors, que ayer se coronó Campeón del Torneo Apertura 2008 tuvo cierta regularidad pero en los problemas que fue padeciendo a lo largo de las 19 fechas del campeonato.
- Se puede nombrar la rotura de ligamentos cruzados que sufrió su ídolo y goleador Martín Palermo a sólo tres fechas de iniciado el campeonato.
- La goleada inesperada sufrida ante Godoy Cruz, equipo mendocino de los denominados “chico”.
- Los entredichos del arquero Caranta con el Director Técnico que provocó su abandono del arco, ahora en manos de un debutante.
- La muerte inesperada del presidente de la institución, Pedro Pompillo.
- La pubalgia que no dejó jugar a su otro atacante estrella, Rodrigo Palacio.
Todas estas (y algunas más) pasó Boca en este campeonato, pero se sobrepuso a todas ellas y hoy es un legítimo campeón.
Párrafo aparte se merece el Club Atlético Tigre, que logra en su corto tiempo en la Primera División su segundo subcampeonato.
Y viéndolos jugar, como un verdadero equipo, es hora de que borremos de nuestro vocabulario la palabra “fracaso” para adjudicar, apuntar y nombrar a aquellos que no logran salir en el primer lugar.
Aunque evidentemente, en este campeonato, algunos sí han fracasado…